En el año 2015, Bosques del Norte S.p.A. modeló, diseñó y construyó, un “Parque de Restitución Ambiental” o “Parque del Agua” en el Jardín Botánico Nacional de Viña del Mar, para una superficie de 250 has que se encontraban degradadas y sin uso, construyéndose obras de conservación de suelos y forestación con especies nativas.

En este terreno, se planteó un modelo de trabajo que permite evaluar e intervenir cualquier predio forestal deteriorado, mejorando las tasas de infiltración de agua lluvias a bajo costo. Este predio presentaba una topografía de fuertes pendientes y quebradas, sumado a baja cobertura vegetal producto de la intervención humana y los constantes incendios forestales en período estival.

Este modelo planteó tres objetivos:

• Captura e infiltración de aguas lluvias hacia las napas subterráneas.

• Recuperación de pozos profundos para diversos fines.

• Un espacio social de educación ambiental, capacitación técnica y esparcimiento (“Parque de Restauración Ambiental”).

El modelo consideró habilitar pozos de aguas que actualmente están sin uso, diseñar y construir obras de conservación de suelo (zanjas de infiltración y diques) apropiadas para disminuir el escurrimiento superficial, capturando las aguas lluvia e infiltrarlas en el suelo.

También considera la recuperación de la cobertura vegetal mediante la forestación de especies adaptadas a la zona (nativas) y exóticas, que contribuirán a darle estabilidad al sistema medioambiental y aumentar el porcentaje de infiltración.

El “Parque de Restitución Ambiental” que se construyó entorno a estas obras de conservación de suelo y plantaciones nativas principalmente, permite mostrar cómo, en forma sencilla y eficiente, se puede aumentar considerablemente la disponibilidad de un recurso tan escaso e importante en esta zona como el agua.

A su vez, las mismas obras de conservación de suelos, tienen un claro componente educativo, ya que permitirán mostrar a niños y jóvenes, cómo se puede intervenir en forma positiva y sustentable la naturaleza, provocando beneficios ambientales y sociales de largo plazo, aumentando la conciencia ciudadana de la importancia del buen uso del agua y el respeto de la naturaleza, especialmente en ecosistemas frágiles como el semiárido.

Finalmente, las actividades culminaron en el año 2021, construyéndose unos 28.000 metros lineales de zanjas de infiltración y 40 diques en los sectores de quebradas.

En el Parque del Agua, plantamos más de 500 Palmas chilenas (Jubaea chilensis), de más de 30 años de edad. Diseñamos, trazamos y construimos más de 28.000 metros lineales de Zanjas de Infiltración. Estas Zanjas de Infiltración han mostrado una gran eficacia en la captura de aguas lluvia y la conservación de suelos.

Permiten atrapar el agua e infiltrarla recargando las napas subterráneas y así evitar la escorrentía superficial que causa erosión y pérdidas de suelo.

En sectores de mayor pendiente, las Zanjas fueron complementadas con la construcción de Diques, que permiten retener el agua de las quebradas y evitar así su erosión por escorrentía superficial.

Emplazado en un lugar estratégico y con la aplicación de técnicas basadas en la naturaleza, el proyecto Parque del Agua estaba llamado a convertirse en un hito, un Modelo de Restauración Medioambiental y de ocupación territorial al servicio de la comunidad.

Lamentablemente, el proyecto fue abruptamente abandonado por la institución que lo financiaba, sin embargo, quedaron las estructuras, la forestación y el diseño de un Modelo integral.

Proyecto de Restauración Medioambiental y Parque Público en Jardín Botánico Nacional